martes, 10 de mayo de 2011

Sanguijueñas en el calcetín.



El sábado nos fuimos de excursión al campo, la idea era hacer una ruta de unas 6h. En España hacerse una ruta por el campo, el monte, la sierra, el bosque puede tener algunos peligros, pero por lo general si no hace muy mal tiempo y llevas agua y una gorra puedes caminar por casi cualquier sitio. Como Singapur es muy pequeño y los únicos caminos que hay por las reservas naturales están asfaltados decidimos irnos a Malasia. Ya os hacéis una idea de que el campo de Malasia no se parece mucho a la sierra de Madrid. El campo de Malasia es jungla. La verdad que lo pasamos muy bien. Fuimos con unos amigos indios bueno a él no lo conocíamos y ella trabaja con D-. Los amigos indios son muy majos, pero a veces (casi siempre) hablan muy rápido y no hay quien les entienda. El caso es que echamos a andar siguiendo el cauce del río (que se supone que es por donde se sube una montaña). Llegamos a una parte que ya no se podía pasar y R- decidió buscar un camino alternativo mientras B-, D- y yo intentábamos seguir el río. Nos paramos un momento intentando orientarnos y de pronto B- se puso a gritar "lichis, lichis! go, go, go" y salió escopetado atravesando los árboles (en verdad estaba diciendo "Leeches") Yo que tenía serios problemas para entenderle y que por supuesto no había oido esa palabra en mi vida no tenía ni indea de que era lo que ponía tan nerviso al indio. ¿pero qué esta diciendo? y yo que sé "lichis".... en eso que miro al suelo (en la jungla no hay suelo hay 30cm de hojas) y veo cienes y cienes de cosas marrones, del mismo color que las hojas retorciendose espasmódicas buscando nuestros pies. "SANGUIJUELAS, LICHIS SON SANGUIJUELAS, GO, GO, GO!" No he mencionado que yo llevaba unas zapatillas (nuevas) de esas que son de agua pero que van atadas al tobillo, como chanclas, con el pie al aire para ir fresquita y que puedes meterte por todos sitios con ellas... bueno pues no debes meterte por TODOS los sitios con ellas... al menos no por la jungla. Por suerte me había puesto calcetines (si lo sé, calcetines con chanclas...) decidimos volver y enterarnos de cual era el camino correcto aunque para entonces no nos quedaban muchas ganas de subir montañas. Llegamos al centro de infromación y nos contaron que para caminar por la jungla necesitas un permiso de la policía y un guía. Nosotros no teníamos ninguna de las dos cosas, así que terminamos bañandonos en un río y comiédonos los bocadillos a 300m de centro de información.
Un sábado cualquiera.

1 comentario:

Paloma dijo...

Que bichitos mas "simpaticos" (puajjjjj). Pobres, desde que los médicos ya no los utilizan para hacer las "sangrías", se han quedado en el paro...