Foto: Estambul, Diciembre 2014
Vamos a por los 6 años de blog.
Empecé esto un poco por curiosidad, por desidia,
por necesidad... Han pasado tantas cosas en todo este tiempo y la verdad, estoy
muy contenta de haber podido plasmarlo aquí. Es cierto que ha habido temporadas
en las que he sido más perezosa, o simplemente no me ha apetecido fingir que
todo iba bien. A veces he tenido que medir mucho las palabras, porque entre los
lectores ha habido mucha gente, mi abuela, por ejemplo fue lectora telefónica
durante mucho tiempo y eso, aunque tuviera que reprimir algunas palabras me
llenaba de orgullo y motivación. Quizá por eso luego dejé un poco de escribir.
Quizá. No sé.
Me han leído amigos y familia, y no sólo mi familia
directa, también mi familia política. Tíos, primos, amigos de amigos... Mucha
responsabilidad para tan poca experiencia. Últimamente, y debido sobre todo al
tiempo que pasé sin escribir se ha reducido notablemente el número de visitas,
y quieras que no, se agradece un poco. También es cierto que ahora me da
bastante igual quien lea esto. Y probablemente os contaré algunas cosas que no
han visto la luz hasta ahora, por miedo, vergüenza o pereza. Os narraré
historias como aquella vez que Javier Cámara (el actor, sí, el actor) me vio de
lejos y acercándose a mí me dijo que tenía unos ojos preciosos y me dio dos
besos. Después de 6 años escribiendo qué menos que terminar con los filtros que
nos separan.
Total,
siempre os cuento lo que me da la gana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario