domingo, 16 de mayo de 2010

LA CALLE


Hola familia! perdón por el retraso pero lo de no tener internet en casa implica tener que ir a algún sitio a escribiros... y eso no siempre es posible.
La semana pasada fue de locos. Hoy por fin hemos tenido un domingo, domingo. Levantarse tarde, una cervecitA con un poco de jamón antes de comer una buena siesta después. Aissssssss, benditos domingos.
Creo que no os he contado que el Bar La Calle está cerrado. El edificio entero se hunde y hay quien se puede quedar sin casa. Para los que me conocéis de hace poco o los que aún conociéndome de hace tiempo no sabéis nada de este bar, os diré que fue el hogar de mi juventud. Y de la juventud de los hermanos mayores de mis amigos, y de la de sus padres. La meca de Ciempozuelos. Peregrinación obligatoria de viernes, sábado y domingo, amén de algún jueves a la hora del café. QUÉ CAFÉ! Un bar con historias, con sofás, una moto y un árbol que en lugar de hojar tiene un trombón. Con su propia estación de Metro y la mejor música entre parada y parada (Gracias a Ignacio).

El viernes fue la Boda de Lupo y creo que a todos nos hubiera gustado tomarnos la penúltima en LA CALLE.

1 comentario:

Kramen dijo...

Gran lugar que me presentaste con los adoquines como suelo y tableros de juegos como mesa...

Se agradece haberlo conocido. Gracias primita... que quede en nuestros recuerdos.