Soy una persona con una gran capacidad para hacer tiempo.
Mis padres se preocuparon de llevarme a vivir a un pueblo a 50min del centro de Madrid con trenes cada 30min. Esto genera una incalculable cantidad de horas de espera en trenes y en amigos. Porque la gente normalmente queda a las en punto o a las y media. Pero mis trenes siempre llegaban a y diez o a menos veinte. Así que si no quería llegar tarde, lo mejor era esperar y sabiendo de la eficacia de rente, lo ideal era llegar siempre un buen rato antes. Por si las moscas. Así empecé a entretenerme. Primero en el tren. 50 minutos. Y luego otros 20 o más esperando a los amigos de turno. Amigas como N- mejoraban sustancialmente mi capacidad de hacer tiempo llegando entre 30 y 45 minutos tardes cada día. Y así le cogí el gusto a la lectura. Luego me regalaron un lector de cd's portátil (la repera). También aprovechaba para estudiar.
Soy capaz de pasar una hora y cuarenta y tres minutos sin hacer absolutamente nada. Sólo ver pasar el tiempo delante de mi. A la hora y cuarenta y cuatro minutos cambio de postura para que no se me duerman las piernas.
Ahora trabajo a una hora y cuarto de mi casa. En lo que va de año me he leído 2 libros de más de mil páginas y los siete libros de Harry Potter. Para que luego digan que el tren es aburrido. Soy capaz de lanzarle una maldición a un chino con solo mirarlo. Avada Kedavra.
En fin, hacer tiempo se ha convertido en mi pasatiempo. Siempre hay un sitio al que llegar o alguien a quien esperar. Siempre.
6 comentarios:
Ya dicen que la paciencia es una virtud.....
Un beso grandote!!!
Tú a mí 'Guigardium levioooOOoosá'
Perdón.... "¡WinGARdium LeviOsa!"
¿pero de verdad te gusta esperar?.
Leer en el tren no es perder el tiempo, es aprovecharlo.
Eso de llegar pronto y saber esperar nos viene de genetica, heredado de los Ayala. Nos educaron muy ricamente para ser pacientes, esto no quita q sepamos aprovechar el tiempo de espera. bss
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